Harry Brook vio cómo Inglaterra ofrecía la peor actuación de su breve reinado como capitán al ser aplastados en Headingley y admitió: "Nadie quiere venir a ver eso".

El público de Yorkshire fue testigo de un desajuste más que de un espectáculo de cricket, ya que Sudáfrica necesitó menos de 46 de las 100 overs programadas para confirmar una contundente victoria por siete wickets en el primer partido de la serie ODI Metro Bank.

Inglaterra fue eliminada por 131 después de ser enviada a batear, con Jamie Smith quedando como único destacado con 54, y observó cómo sus oponentes abordaron la persecución como si fuera un T20. Se salvaron de la humillación de perder antes de que se encendieran los reflectores, pero apenas.

Brook ganó los seis partidos contra las Indias Occidentales al comenzar su mandato con estilo a principios de este verano, pero no intentó endulzar la magnitud de su primera derrota.

“No es suficiente. No puedo decir mucho más que simplemente hemos tenido un mal día,” dijo.

"Obviamente, quieres seguir ganando y ganando, ¿no? Pero hoy hemos ejecutado mal muchas de nuestras habilidades. Nadie quiere venir a ver eso."

"Puedes sacar algunas cositas de ello, pero me temo que tenemos que deshacernos de estos partidos. Tenemos que dejarlos atrás lo más rápido posible y pasar al siguiente encuentro."

Los preparativos de Inglaterra para el partido inaugural de la serie contra un importante rival internacional fueron escasos, por decir lo menos. Con varios miembros del equipo participando en la eliminatoria y la final de The Hundred durante el fin de semana, realizaron una sesión de entrenamiento con poca asistencia el lunes y solo se reunieron como grupo más tarde esa misma noche.

Eso no explica la enorme diferencia entre los equipos en Leeds, sin embargo, Brook se negó a aceptar la explicación fácil.

"En mi opinión, eso es una excusa. No somos un equipo que inventa excusas", dijo.

"Al final del día, esa actuación con el bate no fue lo suficientemente buena. Creo que todos reconocerán eso."

Brook supervisó una bienvenida difícil para Sonny Baker, quien vio cómo sus primeros siete overs en el cricket internacional fueron castigados con 76 carreras, la cifra más cara registrada por un debutante inglés en ODIs.

Podría haber sido retirado mucho antes y ahorrarse más dolor, pero Brook estaba decidido a darle al joven de 22 años todas las oportunidades para asentarse en medio de un ataque brutal de Aiden Markram (86 carreras en 55 bolas).

"Solo estaba tratando de conseguirle un wicket, para ser honesto. Recibió un pequeño toque ahí, pero él simplemente siguió viniendo y viniendo y viniendo," explicó.

“No ha tenido el mejor de los días, pero la energía que aportó y el deseo de seguir insistiendo fue increíble de ver. Puede que haya fallado en la ejecución en alguna ocasión, pero Markram también jugó algunos golpes increíblemente buenos, así que mis respetos para él,” dijo Brook.

"Ha tenido un partido difícil, pero la forma en que siguió adelante y se esforzó al máximo para intentar conseguir wickets para nosotros fue impresionante de ver, y eso es exactamente lo que le pedimos a cada lanzador."

La serie continúa en Lord’s el jueves.